Me gusta leer

Un libro es un cerebro que habla;

cerrado, un amigo que espera;

olvidado, un alma que perdona;

destruido, un corazón que llora.”

¿Cuántas veces se ha abierto la portada de un libro y abandonado, tras unos días, su historia en un rincón? Quizás es porque no se ha descubierto su valía por pequeño que sea.

“Mañana lo retomo”, palabras huecas que no hacen más que engañar al interesado. Quizás sea porque no se ha escogido bien por mucho que nos lo vendan.

Un compañero con cerebro, alma y corazón. Un amigo, con el tiempo, en cada historia compartida. Quizás es por haber sabido elegirlo y aceptar que sea como es: transparente, veraz, paciente…

No es que se quiera evadir de la realidad leyendo un libro, sino encontrar un aspecto que ayude a comprenderla por fantástica, medieval, moderna o futuresca que sea la novela. Y muchas veces la realidad o no que se lee en los libros, lleva a conocer mejor la actitud de las personas ante diversas circunstancias.

La aventura de correr por cada página llena de ánimo, decepción, alegría, tristeza, estrés, perdón, culpa, anhelo, paz, amor, esperanza, vicio, desamor, perdición, vida…

La emoción de conocer la vida de un pasado lejano o no tan lejano, de las personas como tú y como yo, en un ambiente más o menos hostil. La alegría de encontrar sabiduría, consejo, norte en cada palabra, frase, párrafo.

Qué bueno es tener un libro por compañero y qué necesario abrirse al saber.

Tu turno

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s